Zorzal grande, muy moteado. Unos 27 cm de longitud del pico a la cola, que lo hacen el mayor de nuestros zorzales.

Pecho lleno de motas en forma de gota. Dorso pardo uniforme y parte inferior de las alas blancas.

Vuelo potente, recto, habitualmente cerca del suelo hasta que se aleja lo suficiente para ocultarse entre los árboles.

Reclamo frecuente "charr-charr" al que se asocia su nombre vulgar, de charlo o charla.

Canto potente, frecuentemente a primera hora de la mañana, menos melodioso que otros zorzales.

Euroasiático, desde Europa occidental a Escandinavia, norte de África hasta Asia Central.

En la Península Ibérica son sedentarios, aunque durante el invierno acogemos aves invernantes del norte de Europa que se mueven agrupadas en pequeñas bandadas.

Esquivo, prefiere mantenerse siempre a una distancia prudencial del hombre, volando cortos trechos si nos acercamos para mantener su margen.

A menudo come en el suelo tanto dentro del bosque como en pastizales y cultivos de montaña.

Se alimenta de invertebrados edáficos, lombrices, caracoles, insectos y sus larvas, así como de frutos silvestres.

Marcadamente frugívoro, su afición a las bayas pegajosas del muérdago "Viscum album" le da nombre científico (viscivorus, comedor de viscum), aunque ingiere gran variedad de frutos silvestres en otoño e invierno, desde escaramujos a endrinas, manzanetillas, aceitunas, etc...

Nidifica muy temprano, poniendo los huevos desde febrero en sus nidos situados en las copas de los árboles.

Puede ser agresivo en defensa de su nido.