El papamoscas cerrojillo es una de las especies que pueden mostrar dos plumajes diferentes. El macho de plumaje negro es el más común, y muestra todo el dorso negro excepto una mancha alar blanca pura, pequeña mancha blanca en la frente y borde blanco en ambos lados de la cola.

Existen además machos que muestran un mismo patrón de color pero con fondo no negro sino gris parduzco, de manera que pueden confundirse con las hembras.

El vientre es blanco uniforme y todos los machos tienen una mancha blanca en la frente.

Las hembras muestran también una mancha alar pero son de tono pardo grisáceo, muy claras por el vientre.

Unos 13 cm. de longitud, pico fino y negro.

Centro y norte de Europa al norte de los Alpes.

En España falta en la mayor parte de Andalucía y el Oeste peninsular.

Forestal, en general cerca de arroyos, donde abunden los insectos voladores.

Estival, invernante subsahariano.

Vuelo muy característico que comparte con el Papamoscas gris. Acecha desde una rama en la zona exterior de un árbol y sale en un vuelo rápido y quebrado a capturar un insecto volador. Vuelve inmediatamente a posarse en la misma zona donde consume su presa.

A menudo sacude la cola.

Frecuentemente usa las cajas anideras en sustitución de los agujeros de ramas secas en árboles que son su lugar de nidificación preferido.

El papamoscas gris muestra un comportamiento similar.

Este último es de color gris parduzco uniforme en la parte dorsal con los bordes de las secundarias de color más claro, y muy claro por el vientre con la garganta moteada de oscuro. Frecuente en la Vega de Motril, donde no llega el P. cerrojillo.